En ocasiones conviene enfrentarse a un escenario desnudo de artilugios eléctricos y electrónicos para comprender y entender la grandeza de la música.
Un escenario que pueda, junto al músico, lanzarte por los senderos de la música acústica; una música sin artificios ni edulcorantes.
El concierto propuesto para esta jornada, el de Aruán Ortiz y Raynald Colom a dúo, tiene todos los ingredientes expuestos: un escenario desnudo convertido en un banco de pruebas acústico para piano y trompeta.
Y el banco de pruebas no ha decepcionado; más bien aseguraría que ha sido un concierto magnifico, donde dos músicos hermanados sobre el escenario han desgranado con fortaleza y sutileza composiciones de Monk, Ellington, Mompou o del propio Colom.
¡Aplausos sentidos para dos pedazos de músicos!
El concierto propuesto para esta jornada, el de Aruán Ortiz y Raynald Colom a dúo, tiene todos los ingredientes expuestos: un escenario desnudo convertido en un banco de pruebas acústico para piano y trompeta.
Y el banco de pruebas no ha decepcionado; más bien aseguraría que ha sido un concierto magnifico, donde dos músicos hermanados sobre el escenario han desgranado con fortaleza y sutileza composiciones de Monk, Ellington, Mompou o del propio Colom.
¡Aplausos sentidos para dos pedazos de músicos!
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